martes, 5 de mayo de 2009

¿Quién es Muhammad(SAWS)?

Muhammad nació en La Meca, Arabia, en el año 570 después de Jesucristo, cuando el Cristianismo todavía no estaba completamente establecido en Europa. Debido a que su padre falleció antes de su nacimiento y su madre murió poco tiempo después, se hizo cargo de él uno de sus tíos, miembro de la respetada tribu de los Quraysh. A medida que iba creciendo iba siendo conocido por su veracidad, generosidad y sinceridad, y debido a ello se le buscaba como árbitro en las disputas. Los historiadores le describen como una persona serena y propensa a la meditación.

Muhammad tenía una profunda naturaleza religiosa y detestaba la decadencia de la sociedad en la que vivía. Tenía por costumbre meditar de vez en cuando en la Cueva de Hira, cerca de la cima de Yabal al-Nur, la "Montaña de la Luz" en las proximidades de La Meca.

¿Cómo se convirtió en Profeta y Mensajero de Dios?

A la edad de 40 años durante uno de sus retiros espirituales, Muhammad recibió la primera revelación de Dios a través del Angel Gabriel. El conjunto de esta Revelación, que continuó durante 23 años se conoce con el nombre del Corán.

La primera revelación

La revelación de Dios llegó a Muhammad cuando tenía 40 años de edad. Estando en uno de sus frecuentes retiros y meditaciones en la cueva de Hirá, sucedió algo que cambiaría la historia de la humanidad.

Una de las últimas noches del mes de Ramadán, Muhammad ve cómo un luz intensa penetra en la cueva y escucha una voz que le dice:"Lee". Temeroso, responde:"No sé leer". La aparición ordena:"Lee", Muhammad responde nuevamente:"No sé leer" , y la luz le dice:"Lee en el nombre de tu Señor, el que creó; creó al hombre de un coágulo.!Lee! Que tu Señor es el más generoso, que ha enseñado al hombre lo que no sabía" (Corán, 96:1-5). Después de esto, Muhammad siente que el mensaje queda grabado en su corazón.

Al salir de la cueva oyó una voz procedente del cielo que le dijo:"Oh Muhammad , tú eres el Profeta de Dios, yo soy el ángel Gabriel". Muhammad elevó la vista y vio la figura del ángel, que radiante, le seguía donde quiera que mirase.

Las revelaciones llegaban al Profeta a través del ángel Gabriel y descendían en los momentos que Dios así lo disponía. Durante los siguientes 23 años Dios revela a Muhammad los mensajes que contienen las enseñanzas del Islam y se encuentran en el Sagrado Corán.

La característica principal del Islam es que no admite separación alguna entre los asuntos de la vida terrena y los asuntos de la vida espiritual. No se limita sólo a purificar la parte espiritual del hombre sino que su dominio se extiende al orden social, político, moral, económico, etc. Sin que nada se escape al veredicto de Dios en la forma de vida islámica.

Prédica de Muhammad

Los habitantes de la Meca eran idólatras y materialistas, y no podían admitir las prédicas del Profeta, que cambiarían sus vidas. Las ideas de Muhammad eran inadmisibles por dos razones: Una moral: aceptar que sus padres y antepasados adoraban a dioses falsos, ídolos e imágenes; esto implicaba una censura y un castigo eterno, lo que destruiría la gloriosa imagen de sus antepasados. Otra de tipo económico: La Meca no tenía industrias ni zonas agrícolas, ni minerales ni artesanías; toda la economía se basaba en los peregrinos y caravanas, trayendo vicios, bebidas alcohólicas, prostitución y usura, que eran bien explotados y beneficiaban a los gobernantes de la Meca.

Cuando Muhammad intentaba predicar, una turba de asalariados de Abu Sufián cubría su voz con gritos y cantos obscenos, por las noches dejaban basura y restos de carroña en su puerta. No le podían matar, por temor a la venganza de su tribu, que era muy influyente.

Una tarde, cuando el Profeta rezaba, Abu Yahi cubrió su cabeza con el estómago de un camello. Ruqaya, la hija de Muhammad, cortó las ataduras y salvó a su padre de la asfixia. Lleno de sangre, el Profeta dijo:"Vamos a casa, debo cumplir con la oración, el más sagrado y reconfortante de los deberes".

Muhammad envió a un grupo de musulmanes a refugiarse en Abisinia, gobernada por el Negus, un rey cristiano. Este los recibió fraternalmente, porque los fundamentos de la religión islámica no varían mucho de la religión cristiana monoteísta. Los enemigos del Profeta en la Meca enviaron emisarios y presentes valiosos para que éste les entregue los "rebeldes fugitivos", pero el rey, conocedor de la religión islámica, que tanto respeto muestra por Jesús y María, dijo después de trazar una línea en el suelo: "La diferencia entre su religión y nuestra es menor que esta línea, recoged vuestros presentes, los musulmanes son mis huéspedes y se pueden quedar el tiempo que quieran".

El último mensaje

Después de varias batallas y la inserción de numerosos pueblos al Islam, los musulmanes lograron entrar en la Meca victoriosos, sin derramar sangre. Eliminaron de la Ka´ba todos los ídolos a los que se les rendía culto y rezaron al Dios Unico, el Clemente, el Misericordioso, Dueño y Creador de los mundos.

El Profeta volvería a la Meca un poco antes de morir, en la llamada "Peregrinación de la despedida". Allí, ante cien mil personas, recuerda a los fieles el cumplimiento de los preceptos islámicos: Quedan prohibidos el adulterio, la prostitución y las obscenidades - Quedan prohibidos el asesinato, el falso testimonio, el robo, la usurpación, el pillaje - Quedan prohibidas la usura y la calumnia. Todos los asuntos de la nueva nación quedan reglamentados: la tenencia de la tierra, el uso del agua, la propiedad privada, el tráfico comercial, los tributos legales y las relaciones internacionales. El Profeta les dice:"Sed testigos que cumplí con la misión y os hice llegar el mensaje, sed testigos".

Les recomienda: Cuidar de los bienes de los huérfanos, ser considerados con las viudas y los ancianos, generosos con los necesitados, respetuosos con las mujeres; ser recatados en el lenguaje y la forma de vestir, ser justos ente todo y no olvidar que los creyentes son hermanos. Todos los hombres son iguales, excepto en el temor y la adoración de Dios. Todos los musulmanes integran, en igualdad de derechos, la Umma (Comunidad Islámica):

Después retorna a Medina enfermo. Había completado la revelación divina y cumplido con la divulgación de su mensaje, la historia no sería igual después de él (el Sello que cerró la larga lista de Profetas de Dios). Se iría, dejando una generación de creyentes que llevarían el mensaje de la adoración a Dios, el Unico (el Monoteísmo) por todo el mundo, trayendo luz y salvación para la humanidad. Había nacido la civilización islámica.

Inicio difícil de la prédica

Tan pronto como comenzó a recitar las palabras que había oído de Gabriel y a predicar la verdad que Dios le había revelado, él y su pequeño grupo de seguidores sufrieron una amarga persecución, que fue creciendo de forma tan intensa que en el año 622 Dios les ordenó que emigraran. Este acontecimiento, la Hijra, "emigración", en la que abandonaron La Meca para ir a Medina, a unos 416 Kilómetros al norte, constituye el punto de partida del calendario islámico.

Después de algunos años, el Profeta y sus seguidores pudieron regresar a La Meca, perdonaron a sus enemigos y establecieron de modo definitivo el Islam. Antes de que el Profeta muriera a la edad de 63 años, la mayor parte de Arabia era musulmana y, en los cien años siguientes a su muerte, el Islam se había extendido hasta España, en el oeste, y hasta China en el este.

Muerte de Muhammad

A los 63 años de edad, el 12 de Rabí I del año 11 de la Hégira (632 de la Era Cristiana) murió el Profeta (La Paz y las Bendiciones de Dios sean con él).

Mientras sobrevenía la muerte no dejaba de aconsejar a su gente:"No hagáis de mi tumba un objeto de adoración, como lo hicieron las gentes anteriores con sus profetas...Sed asiduos a la oración" Desde ese día, este hombre extraordinario, que estuvo a la altura de los grandes profetas, estadistas, guerreros, teólogos, legisladores, oradores y filósofos, reposa en Medina.

Solamente cien años después de su deceso, el mensaje del Islam llegaba a Francia y España en Occidente y a China en el Oriente.

(Hoy, los musulmanes suman más de mil doscientos millones, en todos los países del mundo y el Islam es la religión de más crecimiento en la tierra).


11 comentarios:

  1. As Salamu Alikum
    Hola,
    Vida del Mensajero Muhammad
    Hermanos, el tema de hoy será una breve mirada a la biografía del mejor hombre que pisó la faz de la tierra. Repasaremos algo de la vida del mejor líder que ha tenido la nación islámica. Hablaremos, pues, de Muhammad, hijo de ‘Abdul-lah, hijo de ‘Abdulmuttalib Al Hashimí Al Qurashí, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam. Al-lah lo elogió en el Corán y enumeró sus virtudes. Al-lah dijo en la Sura “La Misericordia”: {Ciertamente se os ha presentado un Mensajero de entre vosotros que se apena por vuestras adversidades, se preocupa y desea que alcancéis el bien [e ingreséis al Paraíso]; es compasivo y misericordioso con los creyentes.} [Corán 9:128].

    ResponderEliminar
  2. As Salamu Alikum w Rahmatu Allahu w Barakatu
    Gracias por Su tema, y después de su permiso quiero añadir que Allah altísimo en Sura Al-Imran (La Familia de Imán ) { Muhammad no es sino un Mensajero, a quien precedieron otros. ¿Si muriera o le dieran muerte, volveríais a la incredulidad? Mas quien volviera a ella, en nada perjudicará a Allah. Allah retribuirá a los agradecidos. }

    ResponderEliminar
  3. {Quien obedezca al Mensajero obedece a Allah. Y quien le dé la espalda sepa que no te hemos enviado como un custodio de sus obras.}

    ResponderEliminar
  4. Su valor inspiró a muchos musulmanes a seguirlo en las batallas, pero también su amabilidad ayudó a que el Islam se difundiera rápidamente. Él sentía una gran misericordia por esta su nación y esto siempre lo motivó a facilitar las cosas para que se pudieran aplicar sin problema. Como prueba de lo anterior, tenemos el relato en el que su esposa ‘Aishah, que Al-lah esté complacido con ella, dijo: “Cuando se le daba a elegir entre dos asuntos al Mensajero de Al-lah, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, él siempre elegía el más fácil”. Otra evidencia contundente es que por temor de dificultar las cosas a su gente no les hizo obligatorio el uso del Siwak (rama del árbol Arak que se usaba como cepillo de dientes) para cada rezo, dijo: “Si no fuese por temor a dificultarle las cosas a mi nación, les impondría el cepillarse los dientes para cada ablución con el Siwak”.

    ResponderEliminar
  5. vamos aprender cómo adorar a Allah como le adoraba el Profeta Muhammad

    www.fiqhspanish.com

    ResponderEliminar

solo deseo que pongan lo que sienten con sinceridad y respeto.